En esta composición suave y lenta de Wim Mertens, uno de mis artistas favoritos, cómo se combinan los signos, lo entrañable, lo lejano... los sitios donde reside lo anhelado.
Cae la primavera
en mis muslos
como el sol
en la obsidiana
de Su superficie
afilada;
no es límite mi boca
para la tentación
de la noche
que insaciable desciende
entre rosas;
modela el viento
oscuros rincones
estrellas ocultas
en la punta de la ola,
caparazón impenetrable
de un sueño
que emerge en hervores:
Sirena de luz en los ojos
de un lánguido crepúsculo
muriendo
sobre Su fértil navío@.
Sara Elena@
PD: El video vino desde Youtube.
5 comentarios:
Ay Sarita! este poema es especial mas redondo, austero que otros, vos lo escribiste como seria o triste? Te vi en el face entusiasmada con loos Goyas y esto no suena así sino mucho mas lindo!
Hola Guapisiam
Como siempre que entro me pasee por tu fotografías un poquito y luego a disfrutar de tus letras, y ese vídeo...algunos lugares recuerdo.
Un abrazo desde este lado
quise escribir... Gaupisima !! que los deditos me jugaron un mal traspiés
Un encanto la letra y màs encantadora tù, Sarira. Eres una mujer universal. Me recuerdas a Hipatia, la bibliotecaroa se Alejandría.
Estoy cansado amiga, pero me encanto leerte.
Un poema sutil y bellos acompañado de la melodía, nada mejor para soñar.
Un abrazo.
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