Hasta desangrarme...

Aquí están de nuevo las palabras, repetitivas y monotemáticas, a veces en desorden, como si hubiese una pelea que no termina de librarse... Aquí estoy, echando al borde mis entrañas, hasta desangrarme y volver a comenzar...

Voraces peces
inundan mi boca
y zarpa
un barco...
La suya envuelve
frágiles botones
y en sus manos
florecen
las más
sensibles rosas,
breves atisbos
de la luna.
En mis cabellos
de alga se guarece
y se enreda;
con su piel
me fundo
y me abandono.
Me sobresalta
me penetra
con dulzura,
me atraviesa,
me llena
y me colma...@

Sara Elena.

PD:  La foto es la Plaza del Sol, en Madrid, ¡ahhh! y es mía@.